Las madres dicen a sus hij@a que tengan cuidado, no hablen con desconocidos, pero parece que no cren mucho en los monstruos. Mamis, creed a vuestras hijas, porque a veces, hay monstruos, en los lugares o momentos más inesperados. Leed y veréis el susto que se llevó la encantadora Antía.
Que medo!
Cefarun: Lucas Casas
EL MONSTRUO
Había
una vez una niña que salió de su casa y
se encontró… ¡A un monstruo!
La niña se asustó mucho y no quiso ni apoyar un pie en
el suelo porque pensaba que se lo iba a comer. Entonces, volvió a su casa
corriendo a decirle a su madre:
-¡Mamá, mamá! ¡Hay un
monstruo en la calle!
Su madre le contestó:
-No digas tonterías, los monstruos no existen.
La niña insistió:
-Es verdad mamá, ven y lo verás.
Salieron
de casa y el monstruo ya se había escondido. Y la madre le dijo a la niña:
-¿No lo ves? Los monstruos no existen. Vamos para casa.
La niña contesto:
-Es imposible, ¡si antes estaba aquí!
Al llegar a casa, la niña volvió a insistir tanto que salieron
otra vez y la madre lo vio y se asustó mucho y creyó a su hija.
Y la niña se puso muy contenta.
Por Antía Francos
Besiños Antía, eres un encanto, gracias por tu postal, guardaré en mi corazón tus palabras, te deseo muchísimos años maravillosos. Y a tod@s, sois geniales.