Decidirse a investigar está moi ben, axudar aos demáis... xenial! pero debemos ter en conta os riscos.
¿Qué pasará?
Después de ver que el monstruo no
rugía, pensé:
-Creo que no quería hacerme
nada-. Me daba miedo incluso pensar que había visto un monstruo.
Pero como
claramente no sabíamos su intención, ni yo, ni tú, ni nadie, fui a verlo.
El monstruo estaba muy triste y
le pregunté:
-Hola monstruo, noto que estás
muy triste. ¿no es así?
-Sí, -me dijo-. porque nadie
quiere jugar conmigo.
Yo, como claramente vi que me
habló, me volví a asustar un poco. Pero él estaba triste, le dije:
-Yo soy tu nuevo amiga,. No te
preocupes, y te ayudaré a encontrar nuevos amig@s.
Después de unos años, los monstruos pasaron a ser la nueva
generación de amistades de todos.
¿No quiero volver a ver un
monstruo llorando en mi vida!
Por Gloria
El monstruo de las aceras
Érase una vez un niño que sacó un poco el pie de la acera, y
no pasó nada
,
Después volvió a hacerlo y apareció una mano y lo arrastró un
monstruo.
El monstruo era terrorífico, malo y feo, tenía pelos por todas
partes y no soltaba al niño.
Pero tuvo suerte, sus amigos vieron lo que había sucedido y persiguieron
al monstruo y
salvaron a su amigo.
Por Paulo
Un ruído debajo de la cama
Érase una vez un niño, Nicolás, que dormía tranquilo y cómodo en su cama.
De repente empezó a oir unos ruído muy extraños debajo de la
cama. Pensó:
-¿Qué puede ser ese ruído?
Se levantó y miró debajo de la cama. Allí se encontró con la
cabeza de una person:
-Parece ser un zombi-robot, se dijo aterrorizado.
Pero, sin pensar las consecuencias, empezó a tocarlo. El
muñeco tenía un botón de encendido y apagado, y él tocó ese botón
.
El zombi-robot ancenderse, empezó a temblar y sus ojos se
volveron verdes y
brillantes… Se dio la vuelta dispuesto a atacar al niño, se
lanzó a sus pies y ¡se los quería comer!
Justo en ese momento, Nicolás se despertó.
Por Lucas